1. No esperar a tener sed para tomar agua. Tener sed es llegar a que el cuerpo sienta la deshidratación y nos exija hacer algo con eso. Si estás tomando menos de lo que tendrías que tomar, es muy probable que al principio sobre todo, no sientas sed cuando quieras llegar a lo “recomendable”. TOMÁ AGUA IGUAL.
2. Tén siempre una botellita o un vaso de agua “a la mano”, o “a la vista”. El hecho de que el agua esté ahí, hace que sea más probable que tomes por instinto.
3. Ayuda tomar un vaso de agua apenas te despiertes, para “despertar el cuerpo y la mente”.
4. Tomar agua fría unos 20 minutos antes de comer, cierra un poco el estómago, lo que hace que uno no se desbande tanto con “lo ingerido”. Incluso algunos nutricionistas recomiendan para una mejor digestión, no tomar nada desde unos 20 minutos antes de comer, y hasta una hora después de terminar.
Fuente: http://forosguate.com/archive/index.php?t-7200.html